Después de veinte, productivos y hermosos años en la majestuosa ciudad de Nueva York, la vida me trajo de vuelta al puerto de origen, la República Dominicana. El contacto con la naturaleza era algo que había estado deseando durante demasiado […]
Después de veinte, productivos y hermosos años en la majestuosa ciudad de Nueva York, la vida me trajo de vuelta al puerto de origen, la República Dominicana. El contacto con la naturaleza era algo que había estado deseando durante demasiado […]